Por qué es tan importante la calibración

El peso del paciente es un dato clave que se utiliza de muchas maneras, como el cálculo de la composición corporal, la dosificación adecuada de la medicación, la evaluación del crecimiento, etc.
La calibración de una báscula profesional para garantizar la precisión y la coherencia es una parte importante del mantenimiento adecuado. Una báscula que no se mantenga adecuadamente puede dar lugar a resultados menos precisos, lo que puede tener un efecto negativo en los tratamientos que se dosifican en función del peso, como los procedimientos para enfermedades renales.
He comprado una báscula profesional de gama alta, ¿también es necesario recalibrarla?
Los hospitales y otros lugares en los que la precisión y la fiabilidad son primordiales utilizan básculas médicas profesionales. Sin embargo, al igual que cualquier otro instrumento de medición de precisión, están sujetas al desgaste incluso en condiciones normales de uso, lo que puede provocar, con el tiempo, una desviación de la precisión en comparación con la que tenía la báscula cuando venía de fábrica, si no se comprueba regularmente según el procedimiento y se recalibra si es necesario. La calibración permite a los proveedores de servicios comprobar si los resultados han cambiado y, en ese caso, corregirlos antes de que la precisión se vea afectada.
¿Cuándo debo calibrar mi balanza?
Cada país puede tener su propia normativa sobre la frecuencia con la que debe recalibrarse una báscula, aunque normalmente la mayoría de los establecimientos la recalibran anualmente. No obstante, si se detecta un posible error, puede ser necesario programar una recalibración más temprana.
¿Cómo funciona la calibración?
Al realizar la calibración, un profesional certificado utilizará un "peso conocido" (por ejemplo, 20 kg) y comparará la lectura de la balanza con este peso. Si la diferencia supera un determinado nivel, la balanza se ajusta para que muestre correctamente el resultado exacto. Es muy importante tener en cuenta que la pesa conocida debe estar certificada por un laboratorio de pruebas acreditado, lo que demuestra que la pesa está preparada para la calibración, con trazabilidad a las pesas maestras, para que pueda garantizar la precisión.